Terminó

Estos dias...bueno de hecho no hace más de 3, he oido todos los tópicos que, en sí, pueden ser ciertos; olvidale, no te merece, llorar por él no sirve de nada...bueno, lo que todos hemos oido e incluso dicho, un millon de veces.

No sé que hay de cierto en ello. Es posible que llorar no arregle la situación, pero no soy capaz de dejar de hacerlo todo el dia a todas horas y eso que hoy lo llevo mejor que hace un par de dias. Tampoco sé si me merece o no...no sé si yo le merecia a él tampoco, pero como he tenido tiempo de pensar en lo que fué, en lo que viví y en como me sentí y me siento, creo que he sido muy ciega. Creo que habia pistas y no las vi, porque, aunque él no queria ni oirlo (y quizá eso también fué una pista) yo le he querido mucho, muchisimo y no he sido capaz de ver cosas que igual eran muy evidentes. Le queria y le creí, a ciegas ambas cosas y ahí está el error.

Quizá tendria que haber sido más cautelosa, pasarme el dia sospechando y poniendo en cuarentena lo que me decia, los planes que haciamos, las cosas que nos contábamos...pero es que como yo soy bastante simple y lo que digo es lo que siento, imagino que todo el mundo hace lo mismo...creo que no fué así y tambien creo que él no fué suficientemente valiente y sincero para no hacerme daño (las cosas como sean...) porque pienso que él nunca me ha querido...aun con los planes para el futuro, aun con el esfuerzo que me costaba verle, aun con todo.

Si que pienso que habia cariño por su parte, no me ha tratado mal, eso lo sé. Pero me ha hecho daño, sospecho que mucho más del que él cree y mucho más del que él siente hacia mi.

He usado mal un tiempo verbal antes...no le he querido, le quiero aun (increible pero cierto) pero igual que le dije que aprenderia cosas por él, tambien digo ahora que aprenderé a no quererle. Y como he dicho antes, soy lo suficientemente simple para hacer lo que digo, no doy para más.

Bueno, se acabó, ahora me queda superarlo aunque el vacío es casi avismal y no sé ni por donde empezar...de momento como poco, duermo poco, trabajo mucho y lloro mucho. Le echo de menos siempre y la tristeza está instalada en mi. És lo que tiene vivir intensamente, cuando todo va bien soy más feliz que la mayoria de gente, cuando las cosas van mal, me hundo en la miseria.

Es el principio ... y espero que de ahora en adelante consiga estar mejor.

Si, si, parecia que no iba a llegar, pero...

Si, es eso, no lo voy a disimular...y me ha dado de lleno.

Ando tan adolescente que casi no sé ni como describirlo...y es que a lo mejor no hace falta hacerlo, simplemente disfruto del momento y procuro que llene una parcela de mi que estaba totalmente dejada...estoy contenta.

Empezando el año

Hay que darle una oportunidad antes de juzgar...por eso he decidido que aunque todo el mundo augura un futuro nefasto a este nuevo año, yo le doy un margen de confianza. Y no os penseis que no me cuesta...

Me cuesta porque sé que mi presente laboral es relativamente bueno pero mi futuro es inexistente prácticamente...porque sé que en verano estaré en el paro otra vez y quedarse sin trabajo es como una condena en estos tiempos que corren.

Me cuesta porque mi inseguridad en el terreno profesional, me impide abanzar en el terreno personal y esto me mata...lleva años matandome y cada vez cuesta más ser optimista a este respecto, sobre todo cuando no depende exclusivamente de uno mismo.

Me cuesta porque no estoy a gusto, no me encuentro, no sé donde voy ni lo que quiero conseguir, porque me faltan cosas que aunque acostumbro a llevar con cierta dignidad, cada vez pesa más. Porque la vida te da palos y tu vas y sonries, hasta que un dia, sin previo aviso, tus labios se olvidan de como era el gesto y ya todo te da bastante igual...y sigues por los demás o decides que tampoco vale la pena.

Me cuesta porque tengo más dias como los de hoy en los que tiraria la toalla que dias en los que brilla el sol y todo me parece maravilloso..y la balanza cada dia está más desequilibrada (un poco como yo, me temo)

Así que, pese a todo, pese al gran esfuerzo que me cuesta, pese a estar segura que voy a recibir otra bofetada, le doy una oportunidad a este nuevo año. Si, lo reconozco, lo hago porque no me queda otra.